Uno de los principales desafíos a los que se enfrenta el mundo, y el sector agrario en particular, es el cambio climático. Incluso si algunos de los cambios esperados en el clima pudieran representar beneficios en alguna producción agraria europea, la mayoría de los cambios esperados tendrán impactos negativos y afectarán desproporcionadamente a las regiones que ya se ven aquejadas por otros problemas ambientales. Los agricultores y ganaderos europeos tienen y tendrán que adaptarse a un clima cambiante, a través de medidas que van más allá de simples ajustes a las prácticas ad hoc. Con el fin de limitar la vulnerabilidad de sus explotaciones a riesgos climáticos cada vez más variables, la adaptación debe ser diseñada y llevada a cabo de manera sostenible.

Fue en este contexto que nació el proyecto europeo AgriAdapt, respaldado por el programa LIFE de la Comisión Europea. Reúne a socios franceses, españoles, alemanes y estonios, que representan cuatro áreas afectadas por diferentes riesgos climáticos.

El objetivo del proyecto LIFE AgriAdapt es doble: evaluar la vulnerabilidad de los principales productos agrícolas europeos al cambio climático; pero también proponer planes de adaptación sostenibles que permitan que estos sistemas se vuelvan más resilientes. Esta herramienta web de adaptación de AgriAdapt tiene como objetivo destacar los principales resultados del seguimiento de más de 120 granjas piloto en 4 países, compartiéndolas con el mayor número de usuarios en Europa.

Se presenta a través de 3 módulos sucesivos que permitirán mejorar el conocimiento agroclimático para poder impulsar un sector agrario más resiliente. .

A través de una treintena de preguntas diferentes, podrá evaluar sus conocimientos sobre el cambio climático, los impactos agrarios del clima en las diferentes producciones agrarias y las posibles medidas de adaptación a escala agraria.

Se proporcionan 4 cuestionarios diferentes, cada uno correspondiente a la ubicación geográfica de los 4 países involucrados en el proyecto (Francia, Alemania, España y Estonia), todos representativos de una gran influencia climática en Europa: Región mediterráneas o meridional, atlántica, continental y nórdica. Cada cuestionario está sistemáticamente disponible en inglés y en el idioma del país que representa.

Para cada pregunta, hay una o más respuestas correctas entre 4 posibilidades. Simplemente haga clic en su elección (solo una posible) para saber si su respuesta es correcta. Luego aparecerá una explicación en la parte inferior de la pantalla y puede profundizar el tema aún más si lo desea haciendo clic en "Más información".

En cualquier momento durante el cuestionario, puede continuar con la siguiente pregunta si no desea responderlas. Una vez finalizado el cuestionario, un resumen indicará el número de respuestas correctas obtenidas para cada una de las 3 categorías: cambio climático, impactos agrícolas y medidas de adaptación.

Este módulo consiste en una representación cartográfica a través de un mapa que propone la consulta de datos agronómicos (rendimientos) y climáticos (observaciones y proyecciones) para diferentes ubicaciones geográficas en toda Europa.

Simplemente mueva el mapa al área de interés, luego acerque para identificar con mayor precisión el lugar sobre el que está navegando. Cada pequeño cuadrado naranja (o punto de cuadrícula) en el mapa le permite ver datos locales con un solo clic.

Para cada punto de la cuadrícula, podrá consultar una recopilación de los rendimientos anuales de diferentes cultivos (período 2000-2017) que le mostrará la variabilidad en términos de rendimientos. Luego, podrá consultar la descripción del clima pasado (observaciones para el período 1987-2016) que se presenta a través de diferentes gráficos para varias variables: temperatura, precipitación, número de días de congelación, etc. Finalmente, las proyecciones climáticas ilustran en forma de 10 gráficos los cambios climáticos para el futuro cercano (2017-2046), que además son complementados por 19 indicadores agroclimáticos específicos para cereales, forrajes, animales, viñedos y huertos.

Este módulo está dedicado a medidas de adaptación sostenibles que se pueden prever a escala de explotación agraria. La vulnerabilidad agroclimática de una explotación a menudo depende de varios factores climáticos, por lo que es necesario percibir la implementación de medidas de adaptación diferenciadas. Por lo tanto, para cada uno de los 3 sistemas agrarios estudiados, las medidas de adaptación sostenible se clasifican de acuerdo con 4 componentes de la vulnerabilidad agrícola. Por ejemplo, en cultivos herbáceos, las medidas propuestas buscarán mejorar la capacidad de recuperación del sistema de cultivo, las variedades cultivadas, la dependencia del agua o incluso el suelo y las prácticas agrícolas.

La implementación de una estrategia para la adaptación sostenible al cambio climático tiene lugar a lo largo del tiempo. Por lo tanto, las medidas propuestas se distinguen de acuerdo con la posibilidad de implementación a corto, mediano o largo plazo. Para cada medida de adaptación, es posible saber más con un simple clic: luego aparece una hoja de resumen, que ofrece una visión general de su durabilidad general a través de su posible impacto (neutral, positivo o adverso) en un conjunto de 9 componentes: emisión de invernadero gases, calidad del aire, suelo, agua, etc.

Las medidas de adaptación sostenible son específicas para cada una de las 4 regiones de riesgo climático propuestas. Para cada zona, las medidas están sistemáticamente disponibles en inglés y en el idioma del país que representa.

La implementación de una estrategia de adaptación es un proceso de aprendizaje en el que es necesario un avance progresivo que respete varios pasos. Primero, definir y comprender la vulnerabilidad del sector agrario es un requisito previo necesario para cualquier proceso de adaptación. Es imperativo identificar las debilidades y / o fuerzas climáticas del sistema agrario y estar al tanto de lo que es el cambio climático y sus impactos agrícolas.

En un segundo paso, las proyecciones agroclimáticas para el futuro cercano ofrecerán una lectura de las nuevas oportunidades climáticas y/o amenazas que definen el nuevo contexto para la explotación agraria. Por lo tanto, la implementación de una estrategia de adaptación debe contemplar la mejora de las debilidades climáticas y las amenazas a la explotación, mediante la puesta en marcha de mejoras para una amplia gama de componentes de vulnerabilidad. La planificación de las medidas de adaptación debe llevarse a cabo distinguiendo entre lo que se puede implementar a corto, mediano o largo plazo.